El blockchain es ya un factor clave en la economía mundial y Andorra no se ha querido quedar atrás en este avance tecnológico que puede aportar mucho valor añadido al país. Es en este sentido que el Gobierno está trabajando en un marco legislativo y jurídico que regule esta tecnología y haga de Andorra un atractivo para inversores interesados en este campo. Y es que el mundo de los negocios está cada vez más pendiente de la tecnología blockchain, ya que se considera que constituye el futuro de las transacciones y la forma de hacer negocios.
Para entender la importancia de esta nueva tecnología en la economía mundial es necesario comprender el funcionamiento de la misma. El blockchain elimina los intermediarios en las transacciones digitales (como los bancos, por ejemplo) haciendo que sean los usuarios los que controlan el proceso. El blockchain nos permite almacenar información que nunca se podrá perder, modificar o eliminar, garantizando así la transparencia y la seguridad de la transacción, y evitando el fraude. Esta tecnología se basa en el principio de la verdad por consenso, ya que la red de usuarios no necesita una entidad tercera que centralice y valide la información, sino que se convierte ella misma en fuente de confianza.
Existen blockchains privados, públicos e híbridos, y se pueden aplicar a campos muy diversos como la sanidad, la vivienda, los seguros, la energía, las ONG, la automoción, los micropagos, la logística o la gestión de derechos de autor, entre otros. Es una tecnología que abre la puerta a infinitas posibilidades y que el Gobierno quiere aprovechar creando una nueva legislación con el objetivo de establecer una seguridad jurídica estable que permita a los inversores operar en Andorra y desde Andorra.